Kevin Durant es del 29 de septiembre del 88. Tiene apenas 24 años. Es de esa generación que creció viendo Michael Jordan y sus Bulls. Es de esa camada que se quedaba, embobada, admirando a ese hombrecito que con la lengua afuera y un 23 en la espalda hacía cosas imposibles. Todos querían ser como él, saltar como él, jugar en Chicago. Todos menos Durant, que desde chico empezaba a demostrar que era diferente al resto: “Quería jugar en los Raptors, era mi equipo favorito”, confesó hace poco la estrella de Oklahoma por su fanatismo por Vince Carter, otro ícono de fines de los 90 e inicios del 2000 que sigue vigente.
Kevin, el máximo anotador de las últimas tres temporadas de la NBA, no tuvo una infancia fácil. Su padre lo abandonó cuando aún no había cumplido un año y recién apareció 12 septiembres después. El hombre que marcó su vida fue Charles Craig, su primer entrenador y quien ocupó un rol paternal. La muerte de Craig fue, también, otro duro golpe para el astro, que usa la 35 en homenaje a su mentor, asesinado a esa edad.
Pero ahora, con su pasado pisado, Durant alcanzó el viernes por la noche otra proeza, su mayor cantidad de puntos en los cinco años que lleva en la élite del básquet: metió 52 en el triunfo de su Oklahoma ante Dallas, 117-114 en suplementario (su anterior récord eran 51 tantos). El alero la rompió, sobre todo en la prórroga y con un doble a 16 segundos del final para terminar de sentenciar a los Mavericks, que lo padecieron todo el partido. Ni Dirk Nowitzki ni Shawn Marion pudieron frenar a este chico que lidera al Thunder, subcampeón en la pasada temporada y líder del Oeste este año, con 32-8.
Poco importarán los porcentajes, que tal vez no fueron los mejores: 13-31 de cancha, con 5-9 triples; 21-21 libres, nueve rebotes, una asistencia, dos robos y cuatro pérdidas en los casi 50 minutos que estuvo en cancha. Bestial para unos Dallas que tuvieron en Vince Carter, justamente el ídolo de Durant, a su máximo anotador con 29 tantos. Westbrook fue otro que acompañó bien a Kevin, con 31 puntos, más la tarea de Ibaka, que sumó 11 y 14 rebotes. Pero el show fue todo de KD...
ENLACES/FUENTES:
http://www.ole.com.ar/basquet/Durant_0_850715070.html
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